Artrosis en perros es una condición degenerativa de las articulaciones que puede causar dolor y movilidad reducida. Para detectar si tu perro tiene artrosis, observa los siguientes signos:
- Rigidez en las articulaciones: especialmente después de descansar o dormir.
- Dificultad para levantarse o acostarse: parece incómodo al cambiar de posición.
- Movilidad reducida: menos interés en correr, saltar o jugar.
- Cojeo o favoritismo: usando una pata menos que las otras.
- Sensibilidad al tacto: al tocar las articulaciones.
- Cambios en el comportamiento: irritabilidad, depresión o inapetencia.
- Crepitus: sensación de crujido en las articulaciones al moverlas.
Si notas algunos de estos signos, es recomendable consultar a un veterinario. Él puede realizar exámenes físicos y radiografías para confirmar el diagnóstico y sugerir un tratamiento adecuado, que puede incluir medicación, fisioterapia o cambios en la dieta.




